sábado, 14 de enero de 2012

¿Qué maestros y maestras queremos ser? Carmen Mª González Salas

Llevo en el curso desde el año pasado y al finalizar cada sesión salgo con una sensación de entusiasmo y de miedo a la vez. La razón de ello, son las múltiples y ricas experiencias que hemos tenido la oportunidad de escuchar y conocer a través de los ponentes que nos han visitado.
Entusiasmo, porque me doy cuenta de las tareas pendientes que me quedan por hacer y; miedo, porque me plantean un gran reto y me surge la duda de si estaré preparada.
Todo ello me ha servido para reflexionar sobre lo que hago hoy por hoy en mi aula, sobre lo que he hecho desde que comencé a trabajar y, sobre todo, sobre qué quiero hacer y cómo lo quiero hacer de aquí en adelante.
- Mi mayor deseo y reto es, como se dijo en una sesión, "dejar que sea el clima de aula los que decidamos qué queremos aprender". Es decir, comenzar un curso escolar sin saber qué vamos a hacer, entrar en clase e ir avanzando juntos en nuestro camino.
- El mayor obstáculo que una persona puede tener es el miedo; por ello, quiero tener la seguridad y fuerza suficiente para ir superándome día a día.
- Plantear preguntas que nos hagan hacernos preguntas.
- Tener muy presente el papel del deseo, de la ilusión; que los niños y niñas deben tener para implicarse y aprender realmente.
- No quedarme estancanda; tener siempre retos, nuevas ideas, ilusiones...
- Documentar nuestros trabajos para que nos puedan conocer las familias y otros contextos.
Así es cómo me gustaría llegar a trabajar. Pero he de decir, que me siento contenta de haber conseguido propósitos que tenía del curso anterior.
- Haber dado cabida al acogimiento de la identidad de grupo.
- Siento que hay una unión dentro del grupo; que hemos creado ese vínculo tan necesario para que las relaciones surjan.
- Le otorgo mucho tiempo a las conversaciones, dándoles protagonismo a ellos.
- Recojo las conversaciones que surgen en clase y la retomamos en diferentes momentos.
- Trabajamos e investigamos sobre varios temas a la vez.
En definitiva, me siento orgullosa de ir dando pequeños pasos y me gustaría,como expone el texto de Montse Romero "plantearme la cotidianidad de la vida de aula como un proyecto, como un tejido hecho de las voces, que expresan los deseos e intereses de ser, estar y aprender".


2 comentarios:

Docente dijo...

Hola Carmen, soy compañera del curso y al leer tuentrada me he sentido bastante identificada con ella porque tb llevo en el curso desde el año pasado y desde que lo empecé me enfrento a mi clase con una mezcla de miedo y entusiasmo, pero estoy segura que el entusiasmo acaba superando ese miedo y que poco a poco vamos haciendo cosas nuevas. Mucho ánimo

Gema dijo...

Hola Carmen, soy compañera del curso y al leer tu entrada me he sentido bastante identificada con ella porque tb llevo en el curso desde el año pasado y desde que lo empecé me enfrento a mi clase con una mezcla de miedo y entusiasmo, pero estoy segura que el entusiasmo acaba superando ese miedo y que poco a poco vamos haciendo cosas nuevas. Mucho ánimo