martes, 8 de noviembre de 2011

Reflexión textos. Miguel Angel Casanueva 3º primaria Colegio Vedruna

Me han parecido unas lecturas interesantes. Han comentado la experiencia que supone para un docente el cambio de chip a la hora de enseñar. No obstante no dejo de pensar en cómo era yo mismo antes de comenzar a trabajar por proyectos. Me refiero basicamente a los años en los que siguendo el libro guía, se debían transmitir conceptos sin lugar a la improvisación ni la creatividad  (por falta de tiempo para dar toda la materia del currículo).
Debo confesar no obstante que fueron pocos los meses en que yo funcioné de esta guisa. Gracias a mis superiores que nunca se metieron con mi forma de enseñar, durante toda mi carrera profesional, me salí del estereotipo de maestro para buscar algo más.También he de reconocer que  lo hice para no entrar en la rutina que convierte algo mágico como la enseñanza, en algo espantoso año tras año. Me he considerado siempre bastante creativo y animado a la hora de enseñar, dejando el libro como un mero espectador en la mayoría de los temas. Me surgían métodos y actividades contínuamente mientras mis compañeros se ceñían a sus guías.
Ahora sin embargo me siento perdido. Mi referencia y mi seguridad han volado como por arte de magia.
Supongo no obstante que el cambio a este método y al hacerte con él, es como todo en nuestras vidas, cuestión de tiempo. Este es mi primer año trabajando por proyectos y gracias a mi compañera de ciclo que ya tiene la experiencia de dos años, no estoy ahora mismo en el más profundo pozo de la inopia.
Me parece cuanto menos desconcertante, que para alguien como yo y mis características como docente, este método me genere estas sensaciones. Quizá con este curso consiga aprender a descubrir el porqué.

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