TAREA 1. REFLEXIÓN SOBRE TEXTOS. ANA BRUNA

A partir de los textos leídos, la idea del trabajo por proyectos se hace más cercana y factible a la vez que provoca interrogantes e inquietudes que me gustaría compartir.
Es un reto apasionante que supone, sobre todo, un cambio de mentalidad en cuanto a la manera de enseñar. Tenemos que dejar atrás antiguos clichés, que muchas veces nos han acompañado desde el principio de nuestra práctica educativa para poder enfocar el proceso de enseñanza- aprendizaje desde otra perspectiva. Y no es fácil cambiar la manera de actuar en nuestro quehacer diario, sobre todo teniendo en cuenta que todo cambio supone una gran dosis de inseguridad al no tener claro el terreno que pisamos.
El enfoque del trabajo por Proyectos es, desde mi punto de vista, la manera más lógica de enfocar la enseñanza, puesto que es enseñar sobre la vida y para la vida. Partir de los intereses del alumnado, supone, de manera importante, partir de lo que motiva a los niños, de lo que despierta su curiosidad.
En una sociedad donde los cambios y los acontecimientos se suceden a un ritmo vertiginoso, es fundamental enseñarlos a descubrir los acontecimientos, la cultura, la historia, el saber... Es imprescindible conseguir que el alumno pueda utilizar operaciones mentales más complejas, (juzgar, inferir, deducir, investigar, seleccionar la información), que le permitan construir de manera significativa su propio conocimiento. Es aprender con significado. Es, en definitiva, hacer ciudadanos críticos y por tanto, competentes.
Esto requiere, además de la apertura de mentalidad del docente, y la apertura del aula a otras personas distintas del profesor ( padres, profesionales de otras disciplinas, alumnos mayores o más pequeños), una preparación profunda y actualizada del profesorado, así como un compromiso de calidad con la educación y con los alumnos. Y sobre todo, saber cómo llevarlo a la práctica. Surgen infinidad de dudas que se plantean al descender al terreno de la clase. ¿Podemos estar seguros de que no quedarán en el tintero contenidos de valor? ¿Es posible que todos los alumnos, independientemente de cuáles sean los niveles de competencia curricular que tengamos en el aula, alcancen los objetivos marcados? Quizá estas sean las cuestiones que, desde mi inexperiencia, más inquietud me producen.
El primer paso según mi opinión, debe ser la formación de los profesionales de la enseñanza, debemos conocer muy bien los principios de esta metodología con el fin de tener una base sólida en la que poder apoyarnos para implantarla en el aula, así como también, debemos tener la posibilidad de poner en común con los compañeros las experiencias que vayamos viviendo en los Centros. Es fundamental, además de todo, creer en esta forma de trabajo como un primer paso para obtener los objetivos propuestos.
Este curso es la primera vez que trabajo por Proyectos. Me gustaría conseguir integrar todas las áreas en un mismo Proyecto, aunque de momento, me resulta difícil. Es la primera vez que me enfrento a la enseñanza de esta manera compleja pero apasionante; tengo mucho que aprender, dudas que resolver y retos que afrontar, pero supongo que debe ser así: todos los cambios nos hacen crecer y madurar y esto, en nuestra profesión, debe ser una constante.